El peor Milei y los peligros de festejar el dolor ajeno
Del asado del veto al balcón del 52,9% de pobreza y la frialdad frente al infierno cordobés, el presidente perdió el timing y juega al límite. ¿Provocación o disociación? Una sombra cae sobre Karina. Otro “ministro” afuera. La Corte orejea. El peronismo pausa sus furias.