Mientras la administración de Javier Milei defiende el ajuste, sectores sociales y gremiales denuncian que la eliminación de programas y el freno a la obra pública ya provocan miles de despidos, afectando la estabilidad laboral y económica del país
El gobierno del presidente Javier Milei se encuentra bajo un intenso escrutinio debido a la implementación de severos recortes en programas sociales y la paralización de la obra pública. Estas medidas, defendidas por el Ejecutivo como esenciales para el equilibrio fiscal, están generando una ola de críticas por parte de organizaciones sociales, gremios y economistas que advierten sobre un **impacto directo y negativo en la creación y mantenimiento del empleo** a nivel nacional.
Despidos Masivos y Crisis en el Sector Público y Privado
Según informes de diversas centrales sindicales, la **eliminación de miles de puestos de trabajo** en la administración pública y el freno abrupto de proyectos de infraestructura han dejado sin sustento a un número considerable de familias. Representantes de la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA) han alertado sobre la crítica situación de miles de trabajadores del sector, que se encuentran desocupados tras la suspensión de obras financiadas por el Estado. La incertidumbre también crece en áreas vinculadas a la ciencia, la educación y la salud, donde se han reportado no renovaciones de contratos y despidos.
Impacto Social y Llamados a la Reconsideración
Desde organizaciones que asisten a sectores vulnerables, la preocupación es palpable. Se denuncia que la reducción de la ayuda social y el ajuste en comedores comunitarios están agravando la situación de pobreza, especialmente en niños y jubilados. Voces críticas, tanto de la oposición como de algunos referentes del propio oficialismo, instan al Ministerio de Economía, a cargo de **Luis Caputo**, y al presidente Milei a reconsiderar estas políticas, priorizando la estabilidad social y la protección de los trabajadores y los más necesitados. La discusión se centra en si el ajuste fiscal debe tener un costo social tan elevado, y si existen alternativas que permitan sanear la economía sin profundizar la crisis en los hogares argentinos.